El Deseo de Rubén
Ruben, a los 39 años y con síndrome de Apert, es un apasionado de la música y la percusión. A pesar de ser ciego, su oído excepcional le permite sumergirse en el mundo sonoro de una manera única. Su mayor deseo era experimentar la emoción de subir en una ambulancia y conectarse con las sirenas.
La magia comenzó cuando, con la ayuda de los voluntarios Carolina y Miguel Ángel, el apoyo de las amigas de María, su madre, se hizo realidad. Ruben, rodeado de sonidos cautivadores, rió a carcajadas mientras dábamos vueltas en la ambulancia, explorando los diferentes tonos de las sirenas.
La cúspide de la felicidad llegó cuando Ruben, con sus propias manos, pudo quitar y poner los sonidos de la ambulancia, sintiéndose el director de su propia sinfonía urbana. Fue una tarde extraordinaria, donde la generosidad y la colaboración transformaron el deseo de Ruben en una experiencia inolvidable. Gracias a todos los involucrados, se creó un recuerdo especial que resonará en el corazón de Ruben y quienes compartieron este momento único.